CASAS PASSIVHAUS: UN COMPROMISO CON EL AHORRO Y EL CONFORT

Las casas Passivhaus y de consumo casi nulo tienen una demanda de calefacción y refrigeración tan baja que el consumo también es mínimo, teniendo un ahorro energético del  90% en comparación con un edificio existente.

En una casa convencional, normalmente hay un consumo energético excesivo, causa de una mala construcción. Más del 46 % del gasto del recibo energético en un hogar está destinado a la calefacción y a la refrigeración, pero gran parte de esa energía se pierde a través de los cerramientos, encuentros y elementos constructivos. Hay varios puntos débiles por donde se escapa la energía:

ELEMENTO PÉRDIDA DE ENERGÍA
Cubierta 30%
Muros de fachada 25%
Solera 7%
Ventanas 13%
Puentes térmicos 5%
Renovación de aire 20%

Las pérdidas de energía son causa de una envolvente deficiente y no solo se ve reflejado en el coste de las facturas sino también en el confort térmico. A pesar de  tener calefacción en invierno y aire acondicionado en verano, muchas viviendas no son capaces de mantener una temperatura constante todo el año. Para que una casa sea confortable, se recomienda que la temperatura media interior sea uniforme. El disconfort  se produce porque en una estancia interior hay distintas temperaturas del aire, según dónde nos situemos, siendo más frías cerca de las ventanas y de los muros de fachada y más calientes hacia el interior. Tanto es así, que podemos estar en una estancia a 23 º C en la que la pared que da a la calle está a 14º C y la ventana a 9º C. Esto crea pequeñas corrientes de aire que a la larga resultan muy molestas.

En una casa Passivhaus el ambiente está siempre entre 20º y 25º repartidos de forma uniforme, tanto las paredes, ventanas, suelo como el aire interior. La envolvente térmica de estas viviendas está formada por aislamiento térmico y ventanas de altas prestaciones, que gracias a su composición mantienen la temperatura superficial interior por encima de los 17º sea cual sea la condición climática exterior. Tanto la parte opaca como la parte transparente constituyen una única envolvente continua y libre de puentes térmicos.

Conclusiones

La sensación térmica dentro de una vivienda no es solamente la temperatura del aire sino la suma de la temperatura del aire y la temperatura media de las superficies. Es por ello que en una casa Passivhaus se cuidan los detalles de la envolvente para garantizar el máximo confort interior, sin que ello suponga un derroche energético.